Los pasos clave para llegar a su definición.

Uno de los desafíos más difíciles para las PYMEs y las startups es conseguir crear, captar y generar el valor para los clientes.

Estos 3 elementos deben seguir una misma dirección, por lo que la elaboración de un manual que defina cómo se estructura la empresa y cómo cada bloque está interrelacionado entre sí, será fundamental para evaluar aquellas propuestas que atiendan y den solución a los principanles objetivos de tu organización.

Un modelo de negocio es un manual en el que se recogen y estructuran todas las dimensiones que conforman aquello que genera valor para tu empresa, sirve como una guía en la que se refleja el conjunto de decisiones estratégicas que determinan cómo la organización es rentable a corto, mediano y largo plazo.

Elaborar y definir un modelo de negocio es lo que ayudará a tu organización a conocer los principales aspectos de tu empresa y permitirá que las diferentes áreas de negocio trabajen de forma conjunta hacia los mismos objetivos. En su docimentación se deben incluir todos los aspectos de la empresa para obtener una visión 360 de cómo, qué, cuánto y para quién hacemos las cosas.

Elementos para definir un modelo de negocio

Existen distintas herramientas que podemos utilizar para llegar a su definición. El modelo CANVAS es uno de los más empleados por su fácil comprensión y estructuración, en él se condensan los principios básicos necesarios para definir el modelo de negocio óptimo. Estos son:

• Segmentación de clientes: se debe definir el perfil por el cual estamos desarrollando el producto y/o servicio. Este paso facilita la planeación de la estrategia a realizar, ya que todas las decisiones giran en torno a satisfacer las necesidades de nuestro prototipo de clientes.
• Propuesta de valor: es la construcción del producto y/o servicio que dará solución a las necesidades de los clientes, en este paso se debe definir aquello que diferencia tu propuesta ante la competencia.
• Canales de distribución y comunicación: este paso determina cómo se expresa la propuesta de valor e interviene en la experiencia del cliente.
• Relación con los clientes: define cómo será nuestra interacción con el cliente. Si de forma directa o indirecta, y las acciones a realizar para mantener esa relación.
• Fuentes de ingresos: en él se describen y analizan todos los ingresos, que son el resultado de la propuesta de valor que se entrega a los clientes.
• Recursos clave: en este paso se exponen todos los componentes esenciales para que la empresa sea capaz de generar y entregar esa propuesta de valor. Incluye todos los recusos financieros, técnicos, intelectuales, humanos y físicos.
• Actividades clave: recoge todas las actividades que se deben ejecutar para desempeñar la propuesta de valor.
• Asociaciones clave: se definen las relaciones con otras empresas que ayudan en la generación, entrega y captación de valor.
• Estructura de costes: se determinan todos los costes asociados a la ejecución y mantenimiento de nuestras actividades.

En su conceptualización más simple, un modelo de negocio consiste en un conjunto de decisiones estructurales y las consecuencias de esas decisiones. Los modelos eficaces son aquellos que generan ciclos de retroalimentación y que se refuerzan a sí mismos. Por lo que una vez definidos todos los elementos, es necesario verificar que sean coherentes, equilibrados y que estén alineados entre sí.